Mi vida querida – Alice Munro

1
4372

Mi vida querida - Alice MunroLa delicadeza de Alice Munro para tratar temas tan importantes y trascendentes como la muerte o la separación es digna de admiración. En sus relatos encontramos personajes frágiles, a menudo perdidos, ignorantes de las amenazas a las que les enfrentará la vida; no obstante, siempre resultan ser más fuertes de lo que pensábamos. En estos cuentos podremos ver a gentes que aprenden a vivir, que descubren los sinsabores de la vida y los superan, que poco a poco son capaces de vislumbrar la posibilidad de ser felices más allá de todo error. La escritora consigue todo eso con una economía de medios que apabulla por su eficacia: con un estilo elegante y sencillo logra que nos sintamos partícipes de las vidas de sus protagonistas; es más, consigue que aceptemos con facilidad sus coyunturas, sus cuitas y sus soluciones. La conclusión es que podemos hacer nuestra la progresión interior de cada uno y aprender, como hacen ellos mismos, de los tropiezos para conocernos un poco mejor a nosotros mismos.

En general, todos los relatos que componen Mi vida querida tratan sobre personajes que descubren algo en sus vidas que las cambia para siempre; a veces se trata de algo tan importante como el verdadero amor, como es el caso de la mujer de «Llegar a Japón»; otras de algo más prosaico (que no menos trascendente) como pueda ser la independencia, tal y como leemos en «Orgullo». Pero todas las historias tienen en común ese instante de revelación que transforma a los protagonistas, o al menos hace que se modifique algún elemento interior en sus vidas. Es algo que acontece con una genialidad indescriptible en el cuento titulado «Amundsen», en el que una joven maestra llega a una localidad perdida del norte de Canadá para sumarse a la plantilla de una institución para niños tuberculosos. Allí conocerá al doctor que dirige el sanatorio, un hombre solitario y algo huraño que, sin embargo, la enamorará y conseguirá que vea con otros ojos tanto su nuevo hogar como a las personas que lo habitan. Su peculiar historia de amor no tendrá un final feliz, pero la protagonista consigue que mantengamos la esperanza en el amor y en la vida; las pérdidas, parece decirnos el texto, son procesos de aprendizaje: dolorosos, pero necesarios.

De ahí que casi todos los relatos nos muestren a unos seres que se enfrentan a pérdidas de todo tipo que provocan un cambio en su visión del mundo, pero que encajan con una sabiduría que tiene mucho de consoladora y nada de maniquea. Munro cuenta historias amables (incluso cuando habla de la muerte o el dolor), con personajes sencillos y hasta entrañables, pero no se queda en la superficie ramplona de las tramas o en las escenas complacientes; más allá de la aparente candidez de sus relatos encontramos unos personajes fuertes, bien trazados y con personalidades complejas. Simplemente, la opción de la escritora es mostrar algunos aspectos crudos de la existencia humana abordándolos con cierta generosidad. El tono de su narrativa es tierno, optimista y hasta feliz, pero es sólo el barniz que cubre una realidad dura: en sus relatos se esconde la violencia, el desamor y la muerte, pero se afrontan con entereza, porque lo que subyace a todo ello es el perenne esfuerzo del ser humano por rehacerse, aprender (si ello es posible) y avanzar en su camino vital.

Un rasgo destacable en todos estos textos es la complejidad y grandeza de los personajes femeninos de Munro. Nada de clichés, ni de falsas miradas, ni de roles, ni de exageraciones absurdas: sus protagonistas son mujeres que reúnen todo tipo de valores y fortalezas, pero también miedos y defectos. En lugar de contraponerlas a los hombres, la escritora crea caracteres sólidos y profundos, dotados de todo tipo de características que nos llevan a verlos como personas, antes que como representantes de un género en particular. Y pienso de nuevo en la joven profesara de «Amundsen», que a pesar de representar el rol de chica desamparada que se enamora de un hombre en posición de superioridad, muestra una actitud tan valerosa como sensible ante las circunstancias que sobrevendrán.

En pocas palabras: Mi vida querida es un compendio excelente de historias que nos conmueven por su sencillez, pero también por la hondura de una escritora que ahonda en el alma humana como pocos han hecho.

Más de Alice Munro:

1 COMENTARIO

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí