Muerte de un apicultor – Lars Gustafsson

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Muerte de un apicultor - Lars GustafssonNo suelo acercarme a la literatura escandinava, a pesar de que sus autores suelen gustarme (desde que descubrí a Linn Ullman con «Antes de que te duermas»). Por eso creo que hay que agradecer a Nórdica la labor que lleva a cabo acercándonos lo mejor de esta literatura.

«Muerte de un apicultor» ha resultado ser para mí todo un descubrimiento. Es una buena novela. Podría definirla como una novela redonda: sencilla pero hermosa, breve, profundamente humana y, a pesar del tema, divertida en muchas ocasiones.

Lars Gustafsson, filósofo, novelista y poeta sueco, está considerado uno de los máximos representantes de la literatura sueca contemporánea. Licenciado en Filosofía por la Universidad de Uppsala, ha sido profesor en la Universidad de Texas hasta su jubilación.

«Muerte de un apicultor» está considerada como su obra cumbre y es el cierre de una pentalogía titulada ‘Grietas en el muro’, con la que el autor ha pretendido dar a conocer su tiempo y su generación. La novela está compuesta bajo la forma de extractos de distintos cuadernos en los que el protagonista, un profesor retirado dedicado a la apicultura, escribe recuerdos, listas de la compra y algunas historias inventadas.

Nuestro apicultor está gravemente enfermo, y el conocimiento de la inminencia de su muerte le lleva a hacer un repaso por su infancia, su juventud como estudiante universitario, su matrimonio y las relaciones con su amante. Estas historias, escritas con gran sencillez, son capaces de provocar una sonrisa en el lector; y más allá de reflejar la evolución de la sociedad sueca de la posguerra, con sus cartillas de racionamiento, a la preocupada por la temática social o medioambiental de los setenta, resumen perfectamente la vida de un hombre desde la niñez a la madurez, sin artificios ni adornos superfluos.

El dolor causado por la enfermedad es un personaje más entre estas historias, y la manera de afrontar la posibilidad de su muerte, con miedo y rebeldía, hacen aún más humano al apicultor. La soledad en la que éste vive, separado de su mujer y sin relación con sus antiguos compañeros de trabajo, es una metáfora de la soledad que rodea a cualquier enfermo terminal, cuya única compañía posible es la propia enfermedad y la idea de la muerte.

Al final de la novela se intercala una de las historias inventadas por el protagonista que me gustó especialmente, recordándome en cierto modo a la novela «Un día en la vida de Dios». En ella se describe como Dios, despertando de un largo sueño, toma conciencia de las plegarias que le dirige la humanidad y decide escucharlas. Esto genera un verdadero caos en todo el planeta, pero el tono de esperanza que rezuma la narración resulta ciertamente muy conmovedor.
‘Muerte de un apicultor’ es una novela que sabe llegar al lector. Y Lars Gustafsson logra, simplemente a base de retazos, dibujar una vida entera de una manera sobria pero muy bella.

3 COMENTARIOS

  1. libro increible, te hace comprender mas la forma de sentir de los pacientes de enfermedades terminales en general y saber como ser un alivio y no un presipitador de muerte en cada frase.

  2. este libro me ha se introdujo en lo mas intimo de mi corazon, ya que una gran parte de mi famila sufrè de cancer terminal y el doctor me recomendo libro para saber lo que piensa y siente un enfermo terminal, en realidad no se por k escribo esto, pero es una de los libros mas lindos que he leido

  3. Se vislumbra como esa típica sobriedad de los escandinavos, que se ve en el mundo del cine también. Muy interesante descubrimiento, nunca me había parado ante la literatura de allí arriba. Y me gusta esta sobriedad, que se parece tanto a la que tenemos los del norte duro de los caserios. A tener en cuenta. Vuestra web cada vez me gusta más, descubro lo que busco.

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