Bajo el manzano – John Galsworthy

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Bajo el manzano - John GalsworthyIndudablemente, hay historias que resisten mejor el paso del tiempo o el salto entre culturas, y Bajo el manzano se resiente a causa de ello. La visión que la sociedad inglesa de principios del siglo XX tenía acerca de las relaciones sentimentales era, como es lógico, radicalmente distinta a la que se pueda tener hoy día. Y, sin embargo, hay elementos en esta novela corta del Nobel John Galsworthy que suenan muy familiares a pesar de haber transcurrido casi 100 años desde su publicación. Los prejuicios no tienen edad, por desgracia, y la trama que se desarrolla en estas páginas no es más que la plasmación de un puñado de ideas basadas en tópicos y arquetipos (casi siempre erróneos y desafortunados).

Bajo el manzano cuenta (retrospectivamente, ya que el protagonista recuerda los hechos dos décadas después) la visita fortuita de un joven recién graduado, Frank Ashurst, a una villa situada en mitad de la campiña inglesa. Debido a un golpe en la rodilla se ve obligado a alojarse allí, donde conocerá a los habitantes de la casa, entre los que se cuenta Megan, una encantadora campesina de la que, como no podía ser de otra manera, cae rendidamente enamorado a los pocos días. Decidido a casarse con ella y pasar por alto las diferencias sociales que les separan, Frank viaja a una ciudad cercana para efectuar los preparativos necesarios para marcharse a Londres con la muchacha; pero allí se topará con un excompañero y sus tres hermanas, que pasan unos días de vacaciones. La «vuelta a la realidad» que afronta el protagonista será la causa de una serie de consecuencias inesperadas para todos los personajes de la novela.

Como vemos, el centro de la obra se basa en las diferencias sociales entre personajes: mientras que Frank es un universitario educado, Megan es una campesina inculta e inocente; tanto es así que el mismo protagonista la ve como un objeto a proteger, un ser carente de volición al que tendría que cuidar haciéndose cargo de ella. Aunque hoy día esta percepción de la mujer, por desgracia, aún está extendida, lo cierto es que el conflicto del texto surge a raíz de esas inevitables consideraciones que hay que tener en cuenta si pensamos que la novela se escribió a principios del siglo XX. La posición de Frank es de un poder incuestionable: aunque duda respecto a su relación con la joven aldeana, en el fondo sus escrúpulos son más sociales que morales. No se plantea tanto el bien de la muchacha como el suyo propio, si bien lo disfraza de preocupación sincera; sus cavilaciones en la segunda parte de la obra siempre siguen este camino.

Así pues, el conflicto que en principio parece amoroso y privado, pronto deviene social: lo que se plantea el protagonista no es tanto si Megan es adecuada para él como amante, sino como compañera en sociedad. De ahí que cuando encuentra a su amigo de universidad y su familia, personas con las que comparte rango, clase e intereses, comience a reflexionar sobre las dificultades que entrañaría emparejarse con una chica como Megan. Su resolución final tiene tanto de obvia como de curiosa, ya que Galsworthy muestra de forma muy sutil las variaciones que sufre el joven en su consideración hacia la campesina: sin caer en juicios, el autor se limita a señalar esa deriva sutil.

Es una lástima que las últimas páginas de la obra, que sirven como colofón y enlazan con el protagonista adulto que comenzó narrando la historia, caigan en un melodrama ramplón que destruye por completo el buen hacer con que el autor había construido la psicología de Frank. Quizá una concesión al folletín que desmerece del resto y que constituye un triste broche a una lectura, por otra parte, excelente. La habilidad de Galsworthy para recrear ambientes y dibujar atmósferas es digna de mención, ya que los pasajes en los que se describe la estancia de Frank en la casa de campo son de una plasticidad maravillosa.

Bajo el manzano es una hermosa novela cuyo único demérito es su colofón; si obviamos ese detalle, no cabe la menor duda de que constituye una deliciosa lectura, amén de un estudio bastante perspicaz sobre una visión del mundo no del todo pretérita…

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