John Barth es un escritor extraño, audaz, poco común en la literatura actual, aunque sus obras daten de tiempo atrás. En este libro de relatos, repletos de vanguardismo y experimentación, se pueden observar con claridad su manera de escribir, su búsqueda constante de una narrativa alejada de los formalismos más tradicionales, abriendo un camino posmoderno que seguirían más tarde autores como Pynchon o Foster Wallace.
El primero de los cuentos, ‘Viaje por el mar nocturno’, es muy imaginativo (aunque poco sutil); una reflexión sobre la existencia por boca de un ser similar a un pez que se siente perdido en la inmensidad de un océano desconocido. ‘Ambrosio y su marca’ es sencillo cuento repleto de símbolos, muy tradicional, para enfrentar a personajes extraños (emigrantes alemanes) con un entorno diferente (Estados Unidos). ‘Autobiografía’ es una narración en la que la misma narración se torna protagonista, aunque no pasa de ser una boutade excéntrica y algo peregrina. ‘Mensaje acuático’, con el mismo protagonista de ‘Ambrosio y su marca’, es un relato iniciático costumbrista, aunque dotado de una extraña sensibilidad en cuanto a los sentimientos infantiles. ‘Perdido en la casa encantada’ es un experimento en el que la historia ficticia y las incursiones del autor se entremezclan en un conjunto caótico y poco inteligible para el lector, que se pierde en el fárrago de interpolaciones. ‘Dos meditaciones’ es otra reflexión sobre la literatura y la escritura como forma de expresión, de cierto interés por el contenido. ‘Historia de una vida’ también gira en torno al tema del escritor como creador y fabulador, y las formas que teje.
En general, el libro peca de demasiado abstruso y experimental: será difícil que el lector se aproxime al complejo mundo interior de Barth, puesto que la lejanía que impone el autor con sus experimentos impone una barrera insoslayable. Como experimento, por otra parte, es innovador y valiente: personalmente, debo decir que —temeridades vanguardistas aparte— nunca había leído unos relatos tan personales y curiosos. Puede que sus peculiaridades no basten por sí solas para hacer de este libro un buen libro, pero creo que merece la pena acercarse a Barth para, al menos, darse cuenta de que hay caminos aún por explorar en el terreno literario.
Más de John Barth:
De todos los que te he visto estos días, me quedo con este, porque no me lo he leído y porque además el autor no me suena de nada. Y si aún considera que quedan nuevas cosas por explorar en el terreno literario, pues mejor que mejor.
Por cierto, déjame felicitarte por tu capacidad de escritura y lectura, me tienes alucinada!
Un abrazo y Feliz Año, paisana!
Es grata sorpresa encontrar un blog como este, dedicado a los libros, y entre ellos a uno de cuentos. Agradezco en nombre de otros lectores que te tomes el tiempo de contarnos sobre tus indagaciones en el mundo literario.
Por cierto, te invito a mi sitio, tal vez te interese.
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