Ravelstein – Saul Bellow

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Ravelstein - Saul Bellow«Ravelstein» es una novela inteligente, muy inteligente, escrita de forma sabia, contenida, pero plena de sentimiento. Lo cierto es que nunca antes había leído algo del Nobel Saul Bellow , pero este libro ha sido un viaje interesante, muy interesante, hacia una narrativa que, sin grandes alharacas, ahonda en el alma humana y retrata lo que somos realmente.

En la novela se habla sobre la figura de Abe Ravelstein, un viejo profesor de universidad que, tras muchos años de enseñanza, publica un libro de filosofía política que le reporta éxito y dinero a espuertas. En un viaje a París (su último viaje) decide llevarse como invitado a su amigo Chick, escritor, al cual insta a que escriba una especie de biografía suya.

Chick va componiendo una imagen de su amigo a base de retales, de recuerdos, de viajes al pasado para rescatar anécdotas; y Bellow sortea esa dificultad (no ha de ser sencillo representar un personaje a base de pedazos) hasta crear un protagonista para la novela tan creíble que enseguida, a las pocas páginas, el lector ya se lo imagina con nitidez. Podemos verle, escucharle, seguir sus discursos con total naturalidad, con la misma admiración que provoca en sus alumnos y que le han llevado a convertirse en una especie de gurú intelectual para muchos de ellos. Comprendemos que se ‘enamoren’ de él, y ese logro es gracias a la escritura de Saul Bellow, que sin grandes artificios, pero con firmeza, cincela un personaje memorable.

El narrador nos muestra un protagonista de una talla humana inmensa, gran pensador, consciente de las realidades del mundo y coherente con ellas. Inteligente, buen conversador, severo educador, preocupado por sus allegados y visceral hasta la médula, Abe Ravelstein se convierte a las pocas páginas en el maestro —de tradición socrática— que a todos nos gustaría haber tenido. Y no sólo por su grandeza intelectual, sino porque es una persona íntegra, sabedora de sus limitaciones y las de los demás, que emplea sus conocimientos y cultura para llevar una vida más feliz, no para acumular parabienes y medallas. No en vano durante la novela se repite varias veces la mención de que Abe cree que el amor es una faceta importantísima en la vida de cualquiera, no una función psico-física que ha degenerado y perdido su vigencia a lo largo del tiempo.

Poco a poco nos vamos deslizando hacia un punto de vista más personal, el de Chick, el escritor, amigo de Ravelstein ya en su madurez, que entreteje su propia vida con la del maestro desaparecido. Al principio, pudiera parecer que el foco de atención se desplaza hacia él, pero la escritura de Bellow es sutil, de manera que lo que ocurre en realidad es que la figura del protagonista se matiza gracias a la influencia ejercida sobre Chick: los consejos que concedía, las observaciones que lanzaba, las opiniones que censuraba… El personaje de Ravelstein crece en hondura moral al ser observado por alguien que no tiene afán de objetividad. Sin embargo, las últimas decenas de páginas se centran en exclusiva en la figura de Chick y la experiencia cercana a la muerte que le ‘hermana’ de algún modo con el fallecido protagonista, y carecen del interés que, hasta entonces, la novela tenía. Bellow pierde el referente que ha convertido en esencial y esto genera desconcierto en el lector.

No obstante, el libro merece muchísimo la pena gracias a todo lo anterior, ya que, como he dicho, el personaje de Ravelstein parece abandonar la ficción y encarnarse en nuestra realidad, formando parte de un imaginario personal que ojalá fuera la mitad de interesante que el viejo profesor. Las charlas en las que intercambia puntos de vista con sus colegas son inapreciables: por su sentido del humor, por su agudeza y por su brillantez. No es fácil encontrar una novela que reúna en su interior dos logros semejantes: un protagonista perfectamente construido y unas reflexiones agudas y coherentes. En «Ravelstein» se dan los dos, y es una auténtica delicia para cualquiera que busque ese algo más en los libros: una sabiduría sutil, sin vocinglerías ni estridencias, que nos habla de nuestra importancia pasional y racional, que nos llama a amar la vida por encima de todo. Porque, como el mismo Abe recuerda, los judíos creen que el mundo ha sido creado para todos y cada uno de nosotros, y que cuando destruimos una vida humana, lo que se destruye es todo un mundo…

No saldrá uno indiferente de la lectura de esta novela, porque Bellow se revela como un escritor magnífico y un pensador brillante. La difícil unión entre la forma y el fondo se da en «Ravelstein» con una sutileza increíble, yendo un poco más allá y fraguando un libro que resulta interesante por lo que cuenta, por quien lo cuenta y por cómo lo cuenta. ¿Se puede pedir más?

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8 COMENTARIOS

  1. Había leído » Más son los que mueren de angustia» . Excelente novela de Bellow. Imperdible para mi. Asi que cuando encontré en la librería de una estación de micros de provincia «Ravestein» no dudé en comprar el libro . Qué placer leer novelas como estas!!! He comprado luego » Herzog» que está esperando turno. Bellow no sólo es premio Nobel. Es un excelente escritor. De esos que hacen que el lector sienta la nobleza del narrador.

  2. Me gusta para mi es muy importante los libros de lectura es no lo e leido pero me parese que es muy bueno este es de el escritor Saul Bellow de la telenovela muy inteligente pero muy sabia

  3. Se trata de la última obra de saul Bellow, escrita a solicitud de su amigo, el controvertido e influyente Allan Bloom, quien murió de sida. La obra retrata su vida, peripecias y contradicciones. Muchos consideraron la obra un acto de traición al retratarlo sin condecendencia.
    Allan Bloom fue un decisivo profesor de Paul Wolfowitz, el subsecretario de Defensa de Bush y mal logrado Presidente del Bnco Mundial. De hecho, ambos mantuvieron contactos durante la primera guerra del Golfo.
    La correspondencia de personaje es la siguiente:
    Abe Ravelstein es Allan Bloom
    Felix Davarr es Leo Strauss (enigmática y profunda figura intelectual)
    Chick es el propio Saul Bellow
    Radu Grielescu es el especialista en religiones Mircea Eliade
    Rakhmiel Kogon es el socióologo Edward Shills

  4. Efectivamente, es una novela inteligente. Yo tengo la reseña también. La leí en versión original lo que la hace aún más nutrida. Es como lo que comentas de «El gran Gatsby», que la estoy leyendo en inglés, y me parece exquisita y profunda, ya que las traducciones, en muchos casos, no son muy buenas, provocando una gran diferencia en la obra.
    Bellow es un gran intelectual y escritor. A mi me fascinó la intimidad de esta obra, y su ventana a mostrar mucho del propio escritor.
    Abrazos.

  5. […] El argumento del libro es interesante, y la “reseña también”. Leerla en Solo de libros […]

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